DOCSIS, MIGRACIÓN DDA, DATA y redes PON están siendo algunas de las actualizaciones que nos trae este 2021.
En este periodo de pandemia, los operadores ya están pensando en las implementaciones que deben hacer para el futuro dentro de las telecomunicaciones. La reflexión sobre los cambios que estamos teniendo los llevará a preparase para enfrentar a nuevos desafíos.
Este año observamos un desarrollo de cinco tendencias clave para las redes de banda ancha, donde los operadores ya están invirtiendo en la innovación de redes de nueva generación.
Aumento en la red de banda ancha
El contexto desde el año pasado por la covid-19, ha cambiado la forma en la que vivimos. Si antes no era muy famoso el trabajo remoto, ahora se ha convertido en una necesidad para salvaguardar la salud. De igual forma ocurre con la educación y las clases en línea. En consecuencia, vemos aumento significativo en el tráfico de la red de banda ancha a nivel global.
Debido a la alta demanda, los operadores han implementado soluciones como la segmentación de nodos. Los que cuentan con presupuestos más altos están optando por diseños de gama media y alta de próxima generación, que serán de gran ayuda al habilitar los acuerdos de nivel de servicio gigabit más adelante.
Estos cambios, junto con una mayor adopción de tecnologías de Acceso Múltiple por División de Frecuencia Ortogonal (OFDMA) y DOCSIS 3.1, están mejorando las eficiencias espectrales y aumentando los niveles de QAM.
DOCSIS de baja latencia
El DOCSIS de baja latencia está habilitando un nuevo ecosistema de aplicaciones y servicios que aprovechan latencias tan bajas como 5-10 ms. Los juegos de video, generan gran interés en DOCSIS de baja latencia, pero veremos que también abre la puerta a más servicios para el consumidor, como la realidad virtual o aumentada, así como a servicios empresariales, como negociación bursátil, informática de punta y tecnología backhaul celular.
Al implementar una latencia constantemente baja (y, se espera que en el futuro sean incluso aún más bajas) que ofrece un alto grado de confiabilidad y un bajo nivel de fluctuación y variación de demora en la entrega de paquetes, los operadores podrán impulsar una nueva generación de servicios críticos sensibles al tiempo.
DOCSIS 4.0
En los próximos años, los operadores comenzarán a instalar tomas de frecuencia más alta mientras se preparan para las migraciones futuras a DOCSIS 4.0 (D4.0). Aunque las implementaciones completas de esta herramienta tardarán algún tiempo en llegar, ya se están trabajando actualizaciones por fases que nos conducen a D4.0 que siguen siendo avances importantes hacia el futuro 10G.
Las innovaciones de DOCSIS tendrán relevancia para el desarrollo de la tecnología, por esta razón, los operadores deberán crear programas de planificación enfocándose en la implementación y sus posibles formas de uso.
Migración a DAA
El desarrollo de las arquitecturas de acceso distribuido (DAA) está tomando relevancia a nivel mundial. Cada vez vemos más inversiones e implementaciones de operadores líderes tanto en Remote PHY como en funciones virtualizadas como CMTS. El próximo año, veremos que los sistemas de administración remota estarán basados en estos enfoques, al mismo tiempo en que se desarrollan las primeras pruebas de laboratorio y de campo para las arquitecturas MAC-PHY.
Las DAA aprovechan la tecnología y los entornos nativos en la nube para acelerar el tiempo de comercialización de varios servicios y funciones de red virtualizados, abriendo una puerta a un mayor grado de automatización de la red.
Con las arquitecturas de acceso distribuido implementadas y los componentes virtualizados que brindan una visibilidad de red sin precedentes, características como la Inteligencia Artificial (AI) y el aprovisionamiento sin intervención estarán cada vez más cerca y harán que sea más fácil que nunca operar y optimizar la red.
PON
Las redes ópticas pasivas (PON) son vistas como otra vía hacia 10G. Para que muchos operadores den el salto eventual a FTTH, deberán aprovechar sus inversiones en HFC y componentes pasivos para expandirse a capacidades activas de software y de servicio que pueden ofrecer velocidades más altas.
Un área de desarrollo prometedora es aquella conformada por las terminales de línea óptica remotas (R-OLT) que permiten acercar la computación al consumidor edge. Estos módulos, cuando se implementan en redes HFC dentro de los nodos de fibra existentes, permiten velocidades simétricas de varios Gigas. La capacidad de admitir 10G PON, así como actualizaciones profundas de fibra, se convertirá en una opción atractiva para los operadores que buscan aprovechar de inmediato las expansiones del espectro de banda ancha, además de las arquitecturas de acceso virtualizado y distribuido, al mismo tiempo en que reducen los gastos operativos.
Todos estos desarrollos hacen más fácil para los operadores elegir un camino hacia la evolución de la red que se adapte mejor a sus objetivos e inversiones, al mismo tiempo en que aceleran los programas de actualización en respuesta a impulsores de corto plazo como la crisis derivada de la pandemia. Estas actualizaciones están ocurriendo en el contexto de tres tendencias de redes macro que identificamos a principios de este año: cobertura, eficacia y capacidad.
